* ¿ QUÉ ENCUBRE SU FALSA "AUSTERIDÁ" REPUBLICANA ?.
* EL DISFRAZ O APARIENCIA DE UN MEXICANO QUE SE PRESENTA COMO MÁRTIR.
De JOSÉ A. PÉREZ STUART.
* "Bajarse" el llamado "salario nominal" (que ciertamente es oficial, formalmente, distinto y siempre muy por debajo del "salario real" que como Presidente recibe y gasta).
* "Devolver" al erario sólo 22 mil pesos de su "sueldo nominal"; esto es, una mínima parte de lo que realmente percibe-gasta al mes, como fácilmente queda evidenciado, por ejemplo, con su vestimenta diaria: ¿le ha contado usted la variedad de trajes y corbatas que ha lucido en sus desarticuladas, parsimoniosas, reiterativas y contradictorias "conferencias de prensa" matutinas?.
* Renunciar a vivir en la residencia oficial de Los Pinos...
* Anunciar que a partir del cuarto año de su gobierno dormirá en un catre dentro del Palacio Nacional.
* "Someterse" a falsas e ilegales "consultas populares" o " "públicas" para saber si "el pueblo" le permite realizar tal o cual tarea.
* Dizque "pedir permiso" a la "madre tierra" para montar su tren "Maya"...
* Siempre presentarse como víctima de complo+ts...
* Siempre presentarse como víctima de "fraudes electorales"...
Tales determinaciones, que pretenden construir una imagen del Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, como un hombre-víctima-sacrificado, en conjunto parecen más bien ser expresiones, signos, de una conducta patológica en el mandatario.
En efecto, dado el carácter estridente, francamente exhibicionista con que mediáticamente se hacen oficialmente destacar esos signos individuales del mandatario mexicano, lo menos que invitan todos ellos es a ser evaluados, ser analizados, ya que junto con otros más, han ido acompañados de un discurso político que manifiesta el intento de conformar un régimen personalista, en el que más importante que las leyes, los reglamentos y los permisos, lo que se trata de imponer es "el estilo personal de gobernar".
Ahora bien, dado que muchas de sus decisiones en las que se presenta como víctima, como hombre sufrido, no concuerdan con su real forma de vida y disfrute material que ha tenido durante el ejercicio de la política --el cúmulo de propiedades que posee, el inexplicable mantenimiento de ellas y de su propio ritmo y nivel de actividad, etc--, lo primero que queda de manifiesto es que su discurso es inconsistente, por incongruente.
Pero más allá de esto último, a) el agrio discurso político que lo caracteriza, y b) su inconmensurable afán de hacerse destacar como víctima, como un hombre ejemplar, como un hombre sacrificado...más que resultar plausibles, mueven a la realización de un análisis psicológico de Andrés Manuel, que permita descubrir qué es lo que auténticamente hay detrás de su agresivo discurso político cotidiano y su afán de presentarse como víctima, sacrificado y ejemplar.
Así que en base a la experiencia clínica y la teoría psicológica, psicoanalítica y psiquiátrica, se puede captar lo siguiente:
Tanto el contenido del discurso político reiteradamente agresivo de López Obrador, como el lenguaje no verbal que proyecta, ponen de manifiesto la existencia de un conflicto, de un traumatismo infanto-juvenil no resuelto, que precisamente ahora, en la cúspide del poder político, lo lleva a buscar, de manera ciertamente escandalosa, exhibicionista, estridente:
* Trascender.
* Pasar a la historia.
* Alcanzar notoriedad.
* Buscar convertirse en una excepcionalidad.
* Alcanzar preeminencia...
A través de un placentero "sufrimiento", "sacrificio", oblación social...que de forma pública, estentórea, lo haga ser visto como ejemplar. "Único", Inigualable. Inalcanzable.
El ser, pues, adorado.
Para soportar el análisis clínico acerca del proceder de AMLO, uno de los elementos a considerar es que tanto su trayectoria pública como estudiantil, lo presentan como un personaje mediocre. Del montón. Sin ningún hecho extraordinario o destacado. Despuntó cuando recibió oxígeno del entonces Presidente Ernesto Zedillo, en él afán anti salinista de éste último para convertirlo en punta de lanza contra los liberales del PRI, tratando de arrebatarle la gubernatura de Tabasco a Roberto Madrazo. La actitud golpista asumida por López Obrador, le rindió frutos, y así, su modus operandi se convirtió en su modus vivendi: vivir de la organización de marchas, plantones, bloqueos, en los que se presentaba siempre como víctima o líder de supuestas víctimas.
De tal suerte que la victimización se convirtió en su única forma de destacar.
En su forma de sobresalir.
En su forma de trascender.
En su única forma de convertirse y pretender transformarse en una persona "superior" a las demás.
Es la única forma en que, como dice Parkin (1980) al analizar a quienes presentan este tipo de conductas, el paciente, el personaje cree que adquiere una especie de "superioridad ética" frente al resto de los mortales.
De tal manera que al presentarse como víctima, como un doliente...y vanagloriarse de ello, el personaje-paciente lo que hace es revelar, exteriorizar las características de quien, en el fondo, padece de masoquismo..narcisista.
Así es, cuando el que presenta de forma placentera, festiva, "aleccionadora" su padecer, su sufrir, no hace sino evidenciar un padecimiento de masoquismo narcisista. Claro ejemplo es el de AMLO, cuyo ego se ve ensanchado al anunciar que "dormirá en un catre" en Palacio Nacional; al anunciar que se "baja" el salario;, al anunciar que no viaja en avión presidencial; al anunciar que devuelve 22 mil pesitos mensuales (mientras se gasta millones en viajes, comidas, vestimenta, etc)...
Esto es, con esos anuncios que intentan presentarlo como un hombre "sacrificado", que prefiere "padecer" al negarse el acceso a determinados bienes o satisfactores, lo único que hace es inflamar su narcisismo. Es un ejemplo clarísimo del "sufrimiento" placentero, es decir, del masoquismo. Del que goza al padecer.
Sin embargo, como una demostración adicional de que López sufre una afectación psíquica, está el hecho de que su discurso masoquista va acompañado de determinaciones sádicas que lastiman, que hieren, que agreden moral, económicamente a la otredad, a todos los demás. Por ejemplo:
* Nadie puede ganar más dinero que él.
* Todos los que disienten, son "cómplices" de la mafia del poder.
* Todos los que lo critican son amenazados, son "delincuentes".
Este cuadro caracterológico de la patología de López permite observar cómo el traumatismo lo lleva acompañado, pues, de rabia, de rencor, de celos, de agresividad.
De ahí que la patología caracterológica de López se presente como la de un sadismo narcisista sádico.
Por ello hay placer, orgullo, satisfacción, en ordenar que nadie gane más dinero que él.
Por ello hay placer, orgullo, satisfacción, en bajarle salario a los funcionarios.
Por ello hay placer, orgullo, satisfacción, en desemplear a todo el personal calificado de la administración pública.
Por ello hay placer, orgullo, satisfacción, en impedir la construcción del nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, dado que era una obra extraordinariamente moderna...pero por supuesto que no fue ocurrencia de él.
Por ello hay placer, orgullo, satisfacción, en cancelar la "Reforma Educativa" y la "Reforma Energética"...por no ser ideas de él. Lo que no es ocurrencia de López, debe ser destruido, aniquilado. Nadie debe figurar mas que él. Narcisismo puro. Sí, pero con odio, crueldad, sadismo.
A partir de tal comportamiento es que surgen, entonces, una serie de preguntas:
* ¿Cómo habrá sido la infancia de López y, especialmente, el trato que recibió de sus padres y hermanos?.
* ¿Cómo fue su relación con sus compañeros de escuela, desde la primaria hasta la Universidad?.
* ¿Sufrió de maltrato por parte de sus compañeros en la escuela? ¿Fue sometido por sus padres?.
* ¿Su bajo promedio universitario y el largo tiempo que tardó en titularse...subyacen inconscientemente detrás de la reducción del presupuesto a las Universidades públicas (que luego disfrazó de "error")?
* ¿Cuántas experiencias traumáticas carga López en su psique, y que hoy se traducen en sádicas medidas de gobierno?
Mejor que haberle sentado en la silla presidencial ( a la que por cierto parece haber también renunciado, como lo demuestra su negativa a hacerse una foto oficial con ella detrás...mejor le hubiera sentado un diván para ser psicoanalizado.
Próxima entrega: la infancia de López. Aproximaciones psicoanalíticas.
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